¿Conoces el juego de buscar las diferencias?

¡Pues vamos a jugar un rato!

Cuando vives sin electricidad, es la luz del sol la que marca los ritmos de tu día…

Así pasa en los poblados de Lokitaung, que es con el amanecer cuando comienza la actividad.

Los Turkana caminan —muchas veces kilómetros— bajo temperaturas altísimas, o hacen agujeros en el suelo para encontrar agua…

Cuando consiguen algo para llevarse a la boca, salen a buscar leña para hacer fuego y cocinar.

Cortan árboles y hacen carbón vegetal para intentar venderlo en los bordes de los caminos —caminos por donde pasan dos coches al día como mucho— porque es la única manera que tienen para conseguir algun dinero.

Pastorean cabras o camellos, si la familia tiene esa riqueza.

Y al mismo tiempo de hacer todo esto cuidan y atienden a los hijos…

¿Y cuándo cae el sol y llega la noche?

Es hora de dormir en sus manyattas hechas con palos por donde traspasan el frío y el agua…

Duermen en el suelo —encima de una piel de cabra— expuestos a picaduras de mosquitos, con el añadido que es una zona donde hay malaria, escorpiones, arañas y serpientes…

Y eso no queda ahí, si alguno de estos animales les pica deben acudir a un médico y… ¿dónde hay un médico?

¿Se parece a tu día a día…?

¿Cuántas diferencias has encontrado?